Cómo Hacer una Introducción

La introducción es la parte más importante de cualquier trabajo escrito, especialmente si se trata de un proyecto o de una investigación, si has llegado aquí es por que seguramente te has preguntado cómo hacer una introducción, en este articulo te lo explicamos con algunos ejemplos que te ayudarán a elaborar una introducción de calidad.

Cuando te das a la tarea de leer un libro, por muy interesante que sea, ¿te saltas la introducción? Y, si fuera tu proyecto de investigación, ¿te gustaría que tus lectores se enganchen con tu trabajo y una introducción bien elaborada?... Así es, una introduccion bien hecha hará que los lectores de tu proyecto se enamoren y quieran saber un poco más antes de iniciar la lectura.

Mantente atento a lo que sigue a continuación ya que aprenderás como se hace, veremos ejemplos, sus características y los pasos a seguir.

Y... ¿qué es una introducción?

Al abrir un libro, sin importar su contenido, el primer texto que encontramos es precisamente la introducción, un texto que bien puede ser tan breve como un párrafo o tan largo como de cinco páginas o más, es a manera de resumen la presentación del contenido de tu trabajo. Su propósito es dar una reseña de lo que el lector encontrará a lo largo de las páginas que está por leer. Todo el trabajo previo, todo el contenido será revelado a través de tu introducción.

Después de la portada que es la primera impresión, la introducción es el texto que te llevará de la mano al núcleo del contenido por lo que es de suma importancia que el preámbulo de un trabajo sea claro, concisa y que lleve un lenguaje y frases que cautiven al lector.

Que lleva una introducción

Para que sepas que las introducciones son tan versátiles y cautivadoras como el proyecto en sí, te daremos algunos de los elementos para que la introducción sea atractiva y logres que tus lectores tengan una experiencia agradable al leer tu proyecto.

A pesar de ser una de las primeras páginas a leer en el trabajo de investigación, se realiza hasta el final; es decir, teniendo terminado el proyecto de investigación se empieza a redactar la introducción.

Antes de redactar tu introducción es fundamental contestar estas preguntas básicas.

• ¿Cuál es el tema elegido de tu trabajo?
• ¿Cuál es el objetivo de la investigación?
• ¿Por qué hiciste el proyecto?
• ¿Qué métodos empleaste en este trabajo?
• ¿Qué limitaciones o facilidades tuviste para lograr tu objetivo?

Esto te servirá para que tus justificaciones y métodos sean lo más entendibles posible. Una vez que hayas definido estos pasos, entonces estás listo para preparar ese texto que llevará a las personas que leerán tu proyecto a adentrarse de una forma breve y clara.

Como empezar

Estos son algunos puntos importantes para tener en cuenta al momento de iniciar una introducción y deben incluirse.

• Antecedentes del tema.
• Presentación del problema.
• Propósito y los objetivos del proyecto.
• Un resumen de la estructura que presenta el proyecto en caso de ser necesario.
• Si lo deseas se pueden incluir algunas conclusiones generales del proyecto.

Para captar la atención del lector intenta ser claro y conciso, de igual manera utiliza palabras fáciles de entender, mientras más simple y atractivo sea el texto será mejor para el lector.

Explica por que elegiste el tema para realizar tu proyecto, describe la historia y motivos que te inspiraron a abordarlo. Enuncia los problemas que pretendes abordar en el trabajo.

Mientras más corta es la introducción será mejor para los lectores, intenta ser breve y no extenderte a más de dos páginas.

Puedes utilizar citas de algún autor que tenga relación con el tema de tu proyecto, de igual manera utiliza oraciones cortas y breves con las que se facilite la lectura.

Ejemplos para diferentes tipos de proyectos

¿Qué tipo de proyecto has realizado? Una tesis, un ensayo, una novela, investigación científica o tecnológica, un cuento... Cada tipo de proyecto es una oportunidad para introducir a tus lectores de forma clara y oportuna, de forma que comprenderán y se entusiasmarán con tu trabajo.

Podemos mencionar por lo menos seis tipos de introducciones que seguramente te inspirarán.

Con referencia cultural

Este tipo de introducción es muy útil en biografías o trabajos de investigación histórica y por supuesto en novelas. La referencia cultural ayudará a ubicar a tus lectores en tiempo y espacio. Un acontecimiento histórico alrededor del cual transcurre la vida de tu personaje principal ya sea ficticio o real, o el lugar que hayas investigado. El contexto de tu investigación o historia abre múltiples posibilidades a imaginar lugares y épocas distintas.

Pregunta de apertura

¿Realmente quieres que la persona que lea tu introducción abra su curiosidad ante tus investigaciones o historia? Una introducción de pregunta inicial mostrará tus objetivos sobre el contenido de tu libro. Una herramienta muy útil para abrir una reflexión en las personas que abrirán tus páginas.

Introducción de embudo

Al hablar de un cierto problema o sector, o tipos de animales, por ejemplo. Es llamada así debido que sus primeras frases hablan de un panorama general, para subdividirse y finalmente llegar al objetivo del que se hablará en las páginas de tu libro. Este tipo de introducción es muy útil en temas de biología o médicos, científicos y hasta mitológicos. Tolkien describía los tipos de hobbits, enanos y otras criaturas para llegar finalmente a su personaje principal: Frodo.

Cambio de bando

Existen temas que pueden considerarse polémicos y otros que pueden generar diversas opiniones. Este tipo de introducciones puede mirar el lado bueno y hasta romántico de ciertas situaciones que pueden tornarse tormentosas, vistas desde el punto de vista médico o biológico, sociológico y hasta económico. Como ejemplo podemos mencionar la maternidad, un tema que mujeres mayores esperan con alegría, mientras muchas madres adolescentes se enfrentan a diversas situaciones adversas dentro de la sociedad.

Con una historia de impacto

Este tipo de introducción se presta para investigaciones médicas o históricas que llevan de por medio una situación catastrófica para el contexto de las investigaciones o el tema central de una situación que genere una serie de situaciones que se analizan a través de las páginas que escribiste. No dudes en explorar una historia de impacto, que podrá utilizarse perfectamente en tu introducción.

Introducción análoga

Aquí puedes hacer uso de toda tu imaginación para hacer comparaciones entre situaciones y hechos. Analizar y crear comparaciones es una herramienta muy útil para explicar conceptos que puedan ser un tanto difíciles de entender, incluso para ti, o aquellos temas que suelen ser sumamente tediosos pueden tornarse amenos y muy fáciles de comprender. En tus manos está hacerlo de una forma más digerible para quien se sumergirá en las profundas aguas de tus páginas.

Otros elementos

Al abordar los temas de tu trabajo por medio de tu opinión personal, das al lector la oportunidad de conocerte a ti y crear un vínculo más fuerte hacia las personas que se sentirán identificadas contigo. Hasta en las investigaciones científicas como en un artículo de revista, ellos te conocerán por medio de tus opiniones, no pierdas la oportunidad de permitir que tus lectores te conozcan más y observa muchos ejemplos de introducción para inspirarte.

Ya dedicaste mucho de tu tiempo a escribir una obra que sin duda debe ser muy interesante. Prepárate para generar la mejor impresión de tus contenidos y enamorar a tus lectores de tu proyecto por medio de la introducción de un trabajo.

Conclusión:

Para tener una buena introducción se debe comenzar idealizando al lector de todo el contenido del trabajo de investigación en palabras claras y sintetizadas, no debe exceder una cuartilla esto es recomendable para enamorar al lector de lo que le espera al terminar de leer el trabajo, el cual puede ser una tesis, proyecto de investigación, trabajo escrito o cualquier otro tema.